dijous, 6 de novembre del 2008

Romper tabúes


Sin en algo está de acuerdo casi todo el mundo respecto al desenlace de las presidenciales norteamericanas es en que se ha roto lo que parecía ser una frontera infranqueable para cualquier futuro inquilino de la Casa Blanca: no pertenecer a la élite blanca y evangélica. El añorado Kennedy ya rompió moldes por su catolicismo. Barack Obama ha dado el gran paso histórico de acabar con los obstáculos raciales en una carrera electoral.
Y en nuestro país, en España,¿existen tabúes en relación a la elección de determinados cargos políticos? Hasta hace poco mucha gente sostenía que pasarían muchos años antes de que un no nacido en Catalunya presidiera la Generalitat. Pues bien, eso ha sucedido y además Montilla, para disgusto y sorpresa de algunos, es el presidente catalán reciente que más firmeza ha demostrado en la defensa de Cataluña. Otro tabú roto.
Me surge otra duda. ¿Puede un catalán llegar a ser presidente de España? Algún antecedente histórico hay, no demasiado afortunado por cierto. El último en intentarlo fue el socialista Josep Borrell, también sin excesiva suerte. Y recuerdo perfectamente que muchos sostuvieron en su momento que el hecho de haber nacido en Cataluña era una barrera insuperable. Cambó, Companys o el propio Montilla fueron ministros en su momento. Y no me cabe la menor duda de que el señor Duran i Lleida sería un gran titular de la cartera de exteriores. La duda es la siguiente: ¿puede una mujer catalana presidir el gobierno de España? ¿Por qué no? Obama nos salvó de dudas: “She can”